La joven entró en nuestra habitación en el hotel. El día anterior mi esposa y yo habíamos dado una conferencia en una de las universidades del norte de Europa.
Era una hermosa muchacha escandinava. Un largo cabello rubio caía sobre sus hombros. Se sentó con mucha gracia en el sillón que le ofrecimos y nos miró con vivaces y profundos ojos azules. Sus largos brazos le permitían cruzar las manos alrededor de sus rodillas. Observamos sus dedos largos y finos, que revelaban una personalidad tierna y agradable.
Al discutir sus problemas, volvíamos una y otra vez a un factor esencial que parecía ser la raíz de todos los demás. Era lo que menos hubiéramos sospechado cuando entró en la habitación: no podía amarse a sí misma. En realidad, se odiaba tanto a sí misma que estaba a un paso de quitarse la vida.
Autoestima y subestima; autoaceptación y autorechazo; la alegría de vivir y el abismo de la depresión. Estos son los temas que trata Walter Trobischen este libro cálido, personal y verdaderamente práctico.